El tiempo es oro. Muchas veces, dedicarle el tiempo que necesita nuestra rutina facial diaria se convierte en una tarea complicada. Es por esto que te recomendamos estos 3 simples pasos para cuidar tu piel de forma rápida y efectiva: limpieza, hidratación y protección solar.
Es por esto que acá te contamos como cuidar tu piel a diario en 3 pasos, incluyendo estos efectivos productos que garantizarán el máximo cuidado de tu piel.
1. Limpieza
El primer paso imprescindible de cualquier rutina facial es la limpieza, y para ello, es muy importante utilizar productos indicados según las necesidades de cada tipo de piel.
La cosmetóloga clínica de LB Medical Spa, Mariela Baeza, señala que “debemos mantener una higiene diaria utilizando cosméticos que pueden ser lociones limpiadoras, exfoliantes o agua miscelar, dependiendo si la piel es mixta, seca o grasa”
Recomendación SkinCeuticals:
¿Cómo utilizar?
Dos veces al día aplica una pequeña cantidad sobre la cara y el cuello húmedos con un movimiento circular ligero. Enjuaga con agua tibia y seca de forma delicada.
2. Hidratación
La hidratación es indispensable para mantener equilibrados los niveles de agua en nuestra piel, así como también mantener la elasticidad y función de barrera contra agentes externos.
Es importante utilizar productos ricos en Vitamina C y ácido hialurónico en altas concentraciones, presentes en sérums y cremas”, enfatiza nuestra cosmetóloga clínica.
Recomendación SkinCeuticals:
¿Cómo usar?
Luego de limpiar y tonificar tu rostro, aplica 4 a 5 gotas de sérum sobre la piel seca, esparce hacia el cuello y escote. Espera unos minutos antes de aplicar otros productos.
3. Protección
Aplicar protector solar de forma diaria no sólo protege en los días soleados, sino que también dentro de la casa o días nublados. Su uso es fundamental para el envejecimiento prematuro. Debe ser de alto espectro frente a la radiación UVA/UVB con factor +50.
Recomendación SkinCeuticals:
¿Cómo usar?
Aplique el producto protector solar luego de los productos hidratantes. Aplicar cada dos horas, especialmente después de nadar, transpirar o secarse con una toalla.